La minería siempre ha sido pionera en derribar paradigmas. Este sector productivo, en 2007 fue el primero en el país en adherir a las buenas prácticas de equidad de género y sistematizar, a través de una norma, la incorporación de mujeres al sector.
Así lo cuenta Claudia Cabrera, la primera gerenta general de una división de Codelco, hecho que marca un hito para la compañía. Hoy conversa sobre esto y más con G&M Gestión Minera.
Claudia Cabrera es ingeniera civil Química de la Universidad de Concepción, tiene un diplomado en Gestión y es Master of Business Administration en Gestión Minera de la Universidad de Chile. Cuenta con 25 años de experiencia y comenzó su carrera profesional en Codelco al realizar su práctica en Chuquicamata. Ocupó diferentes roles en esa división y en Casa Matriz para luego partir a la minería privada.
La profesional asumió en 2018 como gerenta de Planificación y Control de Procesos de Minera Escondida de BHP-Billiton, para sumarse en 2021 al equipo de Antofagasta Minerals como gerenta corporativa de Riesgo de Seguridad, rol que desempeñó hasta antes de asumir este nuevo desafío en División Gabriela Mistral.
Lo primero es agradecer este espacio que se está dando para conversar con G&M. Comenzamos con la pregunta obligada ¿Qué significa como profesional, pero también en lo personal, ser la primera mujer en asumir como gerenta general de una división de Codelco?
Yo soy la agradecida de poder compartir mi experiencia.
Mi nombramiento como gerenta general de una de las divisiones de Codelco es un gran hito dentro de la industria y en particular para la compañía, la principal empresa estatal de nuestro país, porque es reflejo de la transformación que actualmente experimenta y del trabajo que se ha venido realizando desde hace décadas en cuanto a inclusión, diversidad y equidad de género.
En nuestro país y en especial en minería, existen muchas mujeres profesionales que son de excelencia y en Codelco podemos encontrarlas en puestos estratégicos que van desde los roles asociados directamente a la operación, supervisión, ejecutivas, vicepresidencias y el directorio.
La presencia de cada una de nosotras en esta industria es una señal, un llamado y una responsabilidad para que más mujeres se incorporen. Espero que seamos una inspiración para que más jóvenes ingresen a carreras técnicas o profesionales vinculadas a la minería. Esta es la manera de enriquecer equipos diversos.
Mientras que para el sector el desafío es generar las condiciones para desarrollarnos y potenciar nuestro talento, e instancias de conciliación entre nuestros intereses personales, familiares y profesionales.
No obstante, lo anterior, lo clave es el posicionamiento de la mujer en todos los cargos y roles.
¿Cuál es el primer desafío que debe enfrentar al asumir este cargo?
Más que un desafío es velar porque sigamos reforzando las acciones en torno a la seguridad y la salud ocupacional de todos y todas quienes laboran en Gabriela Mistral; y lo segundo, seguir con la planificación de este año en cuanto a producción y costos, como también en cultura organizacional y relacionamiento comunitario.
¿Y los propósitos al corto y mediano plazo?
Es de público conocimiento que en Codelco estamos transitando por un momento complejo. El camino que hoy enfrentamos es distinto y, tal vez, el más desafiante de nuestra historia. Las complicaciones propias de nuestros longevos yacimientos y sus desafíos técnicos, hoy nos enfrentan a un reto mayor. Es urgente que hagamos todos los esfuerzos por recuperar nuestra competitividad, mantener nuestros niveles de producción y capitalizar los proyectos que sustentarán el futuro de Codelco.
Por eso en las divisiones estamos llamados a cumplir nuestras metas y a buscar oportunidades de mejora continua que nos permitan optimizar los rendimientos y nuestro aporte al país.
En el caso particular de Gabriela Mistral, nuestros pilares son la seguridad y salud ocupacional de todos y todas quienes trabajan en la división, como también cumplir con nuestro presupuesto productivo y bajar los costos, además de ser un referente en materia de sustentabilidad y mantener una relación colaborativa con las comunidades que compartimos un territorio y desafíos.
En cuanto al largo plazo, estamos trabajando en mejorar la información geológica disponible que nos permita identificar nuevos recursos disponibles para continuar extendiendo la vida útil de la división y lo que ello significa para la Región y para Chile.
En estos 25 años inmersa en el mundo de la minería, ¿cómo ha visto la evolución de la inclusión femenina en el rubro minero?
La minería siempre ha sido pionera en derribar paradigmas. Este sector productivo, en 2007 fue el primero en el país en adherir a las buenas prácticas de equidad de género y sistematizar, a través de una norma, la incorporación de mujeres al sector.
El presente es distinto y mucho mejor, puesto que progresivamente esas acciones están pasando a formar parte de conductas y prácticas rutinarias que se generan desde el diseño de los proyectos y que se están manteniendo en el ADN de las empresas. En general, las grandes mineras están dando importantes pasos que dan cuenta de una nueva etapa en la minería.
En Codelco, sumado a los importantes y significativos avances en la incorporación de mujeres en diferentes áreas del negocio, hoy contamos con referentes en el directorio, el comité ejecutivo y en cada una de las divisiones en cargos que son estratégicos.
Tenemos una meta muy clara a 2027, que es llegar a un 35% de mujeres en la Corporación y con la transformación que estamos protagonizando, estoy segura de que seguiremos siendo una empresa que atrae y desarrolla talentos.
Como ingeniera civil Química, además de su gran experiencia en minería, ¿cómo avizora el panorama minero?
La minera tiene grandes desafíos. Primero, es la seguridad y salud ocupacional, donde lo principal es el cuidado de la vida y de la familia. A pesar de que somos una de las industrias más seguras, debemos seguir haciendo los esfuerzos para erradicar los accidentes graves y fatales.
El segundo punto, es reconocer y destacar que el cobre es un metal fundamental para enfrentar el cambio climático. Por eso, es clave que como industria sigamos transitando por el camino de la minería responsable y adaptada a las nuevas tendencias de producción con energías renovables y más limpias, nuevas tecnologías y con un claro foco en el cuidado del entorno social y comunitario.
El tercer desafío es enfrentar la caída de las leyes de los yacimientos y la profundización de los rajos con operaciones y procesos con continuidad operacional y resultados esperados, lo que se logra con diciplina y excelencia operacional.
En este camino son fundamentales las empresas colaboradoras, las que también deben asumir un rol de liderazgo en cada una de estas materias para compartir los objetivos y los logros, atrayendo a las y los trabajadores locales y generando espacios para que más empresas proveedoras de las zonas donde operamos se incorporen a la cadena productiva.
En el mes de la minería, ¿qué mensaje le gustaría transmitir a quienes forman parte de este rubro?
La seguridad y salud son la base de nuestras decisiones y acciones. Quienes nos desempeñamos en minería debemos realizar nuestro trabajo con la mayor rigurosidad en cuanto al cumplimiento de los estándares de seguridad y salud ocupacional pensando siempre en el autocuidado y el cariño a la familia.
Aprovecho este espacio para agradecer y reconocer todo el esfuerzo y compromiso de las y los trabajadores de Codelco y nuestras empresas colaboradoras, mensaje que por supuesto también comparto con todas las personas que formamos parte de esta industria.
Este es un buen mes para reafirmar nuestro compromiso con la sustentabilidad y el relacionamiento comunitario, es primordial que como empresas mineras tengamos una producción respetuosa. Además, debemos cumplir con nuestras metas productivas que, en el caso de Codelco, se traducen en nuestro compromiso con el país.
