Carolina Hernández, gerente general de Academia.Holtec
Viviana Rojas, jefe de ventas de Holtec SpA
En el mes de la mujer, es importante reflexionar sobre su situación en el mundo y, en nuestro caso, en el ámbito laboral en el sector minero.
Según el estudio “Mujer y Minería 2022. Barreras y desafíos para la incorporación y desarrollo de la mujer en la industria minera”, realizado por la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Chile, en conjunto con la ONG Women in Mining Chile, las mujeres representan solo el 10,8% de la fuerza laboral en la minería en Chile, siendo, paradójicamente, éste uno de los sectores de mayor relevancia en la economía del país.
La razón de esta enorme brecha, que, si bien por años se ha adjudicado principalmente a la falta de oportunidades, tiene otro componente muy relevante, que corresponde a las significativas barreras que enfrentan las mujeres para ingresar y progresar en esta industria.
De acuerdo con el estudio, los principales obstáculos son: la falta de oportunidades de capacitación y desarrollo, la discriminación y los estereotipos de género, además de la falta de apoyo de las empresas para conciliar el trabajo y la vida familiar.
Por otra parte, las mujeres también se exponen en mayor medida al riesgo de acoso y violencia en el lugar de trabajo, lo que podría desalentarlas a ingresar en esta industria.
Es importante destacar que la falta de mujeres en la minería no se debe específicamente a la falta de interés o habilidades.
De hecho, de acuerdo con la información contenida en el mismo documento, se sabe que las mujeres que trabajan en esta industria tienen altos niveles de educación y habilidades técnicas, radicando el problema de su ingreso en las barreras estructurales, sociales y culturales.
Para abordar este problema, es necesario un esfuerzo conjunto de las empresas, el estado y la sociedad civil.
Esperamos que las empresas que buscan atraer y retener talento femenino, tomen aún más medidas en cuanto al fomento de la diversidad e inclusión, estableciendo políticas que busquen prevenir la discriminación y el acoso, apoyando la conciliación de la vida laboral y familiar, así como también ofreciendo oportunidades de capacitación y desarrollo no solo para las mujeres, sino para todos.
En este mes, hay que comprometerse en trabajar juntos para superar los obstáculos que enfrentan las mujeres en la minería y en todas las áreas de la sociedad. Solo así podremos lograr un mundo más justo e igualitario no solo para nosotras, sino también para todos.